Es muy curioso esto de la justicia. Finalmente parece que se empieza a poner orden en el tema del Yak 42, que las familias de las victimas pueden empezar a salir de ese túnel en el que les habían metido, pero paradojicamente quienes más pagan son los comandantes José Ramón Ramírez y Miguel Ángel Sáez, que si se confirma su pena de año y medio, serán expulsados del ejercito. Es decir, tienen que rehacer completamente su vida dos personas que han realizado su trabajo, seguir ordenes de sus superiores. Realmente estamos consiguiendo desde hace tiempo que nuestro ejercito sirva para defender el orden democrático, lo que implica que siguen las ordenes de sus superiores politicos, pero esos superiores politicos no pagan nada, invita la casa!!